viernes, 20 de diciembre de 2019

Relatos y Anécdotas policiales I: La despedida

¡Compis! Estoy por aquí de nuevo, y bueno, hoy estrenamos una nueva sección en el blog. Os pregunté por Twitter y os gustó la idea, idea que por cierto me dio un buen amigo, hermano y compañero mío. Este primer relato es suyo y me emocionó mucho, pues soy parte de él. He cambiado los nombres por tema de privacidad. Y nada, una vez hecha la presentación, allá va.


El último día que nos despertamos juntos en la habitación 116, fue temprano y tomamos el desayuno en la habitación. Había momentos de silencio, pero era un silencio distinto, era diferente a otros días porque sabíamos que la historia tan bonita que empezó el día 10 de septiembre de 2018 llegaba a su fin. Recogimos todas nuestras cosas e hicimos la maleta por última vez. Llegó el momento más duro, la despedida. Yo tenía que bajar, elegir el destino y me tendría que ir sabiendo que cuando volviese a coger la maleta ya no estaría ninguno de mis tres grandes amigos. Fue el momento del año, Iván y yo no nos pudimos contener, Manu y Jesús llevaban la procesión por dentro pero también se les notaba tristes. Fue un momento duro, pero sabiendo que la ENP me había dado tres nuevos hermanos. Bajé al auditorio con algunos compañeros de sección y lo que debía de ser un gran instante de mi vida lo pasé con un poco de tristeza porque sabía que ya no iba a vivir más grandes momentos con tan grandes hermanos. Al final elegí lo que quería, pero por los pelos, ya que solo quedaban 6 plazas de mi destino. Después fui a recoger mi arma a la galería de tiro y estuve esperando al menos 2 horas en la cola. En esa espera te ibas despidiendo de algunos compañeros que te cruzabas, ya que ellos ya habían recogido su respectiva arma. También conocí a otros que eligieron el mismo destino que yo. Recogí el arma y fui para la habitación a coger la maleta. Era la última vez que entraba a la 116, pero ya no la sentía como mía, estaba vacía. Vacía de nuestras pertenencias. Sin nosotros dentro. Cuantos momentos buenos y cuantas historias aguardan las habitaciones de la Escuela Nacional de Policía. Camino a la puerta de la Escuela, era la última vez que escuchaba ese ruido de maletas por las aceras. Ahora sí, abandonaba la Escuela, esa Escuela que me ha dado tanto.


¿Qué? ¿Os ha gustado? Momentos especiales los de esa 116. Pues nada compañeros, espero vuestros relatos y anécdotas, puede ser una gran idea compartirlos con todos. Ya os dije, podéis mandarlos a través del correo persiguiendounsueno@outlook.es y a través de Mensaje Directo en Twitter
Dicho esto, os deseo FELIZ NAVIDAD. Ha sido un gran año para muchos y de aprendizaje para otros, estoy seguro que el próximo será aún mejor.